Hoteles Pullman en Auckland

Auckland es una combinación de energía, cultura y creatividad. Desde Britomart hasta Waiheke, los lugares emblemáticos y las comunidades diversas despiertan ideas nuevas, conexiones atrevidas y un ritmo único isleño citadino.

Aun así, la ciudad más poblada de Nueva Zelanda se enorgullece de su impronta urbana y contemporánea en el centro de la ciudad. Detrás del puerto y sus elevados mástiles se encuentra el Museo Marítimo de Nueva Zelanda, luego la Catedral de San Patricio y el distrito de negocios, repleto de rascacielos. Entre ellos, la Torre Sky, el edificio más alto del hemisferio sur. Esta hazaña arquitectónica es un punto de referencia visual en el perfil urbano de Auckland, que se puede ver incluso desde Parnell. Aquí, en el vecindario más antiguo de la ciudad, la actitud relajada de los kiwis predomina y hace que usted se olvide del bullicio de SkyCity y cosas semejantes. Las casas de madera que fueron construidas por los colonos del siglo XIX albergan en la actualidad galerías de arte. Muy popular entre los artistas, en este elegante vecindario residencial se encuentra el Museo de Auckland, uno de los más importantes del país, que se alza en la exuberancia verde de Auckland Domain. Después de esta presentación del verdadero Auckland, diríjase al elegante y bohemio Ponsonby. Puede que quede bastante lejos de Sylvia Park, el centro comercial más grande de Auckland, pero Ponsonby es un lugar favorito y popular entre los fashionistas, con sus tiendas conceptuales, marcas de lujo y vitrinas de diseñadores. Karen Walker, la gran dama de la moda kiwi, vive aquí e inauguró una de sus boutiques aquí. La diseñadora es la prueba definitiva de lo bien que Nueva Zelanda exporta creatividad. Karen proviene de una fértil comunidad artística y receptiva que siempre está activa. Auckland es el escenario de muchos eventos, como el Festival de Artes de Auckland, el Festival de Cine Internacional de Nueva Zelanda y el Festival de Faroles de Auckland.

Este último es el reflejo del ADN cosmopolita de una ciudad aislada por la geografía, lo mismo que el país al que pertenece. La comida está influenciada por los sabores de Francia y Asia, y es el resultado de una fusión que no renuncia a la saludable frescura de los ingredientes. La gran cantidad de mercados en el paisaje urbano, como el siempre popular Mercado Nocturno de Auckland y el Mercado de Otara, son solo dos ejemplos que hacen agua la boca. Aquí también se celebra la relación de la ciudad con la naturaleza… Al fin y al cabo, Auckland se construyó sobre volcanes. Este pasado geológico es el pretexto para una última aventura a One Tree Hill, un volcán que se eleva en el Parque Cornwall. Esta enorme joya verde es el final perfecto para su presentación de Aotearoa, la “tierra de la larga nube blanca” en maorí, y el telón de fondo ideal para que los hoteles Pullman reciban a viajeros ansiosos por experimentar la energía vital de Auckland.