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Presenta
Malaysia
Fascinante y enigmática, Malasia es la tierra de las mil caras. A primera vista, es un país exótico y desconcertante para los viajeros. La selva abarca más de la mitad de su superficie y alberga especies animales únicas y una exuberante y diversa vegetación compuesta de árboles milenarios. Con su entorno bien conservado, Malasia es el lugar perfecto para la aventura y el paraíso para los amantes de la naturaleza. Paradójicamente, también es un destino tan ultramoderno y vibrante como su capital cosmopolita.
Kuala Lumpur es el corazón económico y cultural del país, así como el más claro ejemplo de su rápido crecimiento. La intensa urbanización de esta bulliciosa metrópolis ha conseguido esquivar los antiguos templos budistas que siguen de pie en todo su esplendor a la sombra de los rascacielos que se han erigido durante los últimos años. Al igual que los barrios antiguos y tradicionales, se han conservado con sumo cuidado. Mientras que ciudades nuevas como Putrajaya, la exuberante y verde capital administrativa, y Cyberjaya, la respuesta malaya a Silicon Valley, se han constituido en la península, el país ha conseguido mantener su encanto auténtico. Es un fabuloso crisol en el cruce entre Asia y el mundo árabe. Su riqueza se resume en la increíble diversidad de la cocina malaya. El tercer aspecto notable de este destino tan particular son sus playas idílicas de postal. Malasia cuenta con numerosas islas paradisíacas con aguas cristalinas y tranquilas calas en las que relajarse tras una aventura de buceo o esnórquel. Borneo, Tioman y el archipiélago Langkawi son legendarios. Estos paraísos exuberantes y plácidos presumen de selvas habitadas por orangutanes, acantilados de caliza, ciudades coloniales y ríos verde esmeralda bordeados de cabañas tribales. Todos estos elementos se combinan para ofrecer una multitud de experiencias diferentes en Kuala Lumpur.
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